Una sustancia antibacteriana en la pasta de dientes podría combatir enfermedades potencialmente mortales como la fibrosis quística o la fibrosis quística cuando se combina con un antibiótico, la tobramicina.
Cuando el triclosán, una sustancia que reduce o previene el crecimiento bacteriano, se combina con un antibiótico llamado tobramicina, mata las células que protegen a la bacteria de la fibrosis quística, Pseudomonas aeruginosa, hasta en un 99,9%, y podría utilizarse como tratamiento contra la fibrosis quística, según los resultados de un estudio publicado en la revista médica Antimicrobial Agents and Chemotherapy.
La fibrosis quística es una enfermedad genética que afecta a entre 2.500 y 3.500 personas diagnosticadas a una edad temprana. Desarrollan moco espeso en los pulmones, que se convierte en un imán para las bacterias.
Estas bacterias son notoriamente difíciles de matar porque están protegidas por una barrera viscosa conocida como biopelícula, que permite que la enfermedad prospere incluso cuando se trata con antibióticos.
Investigadores de la Universidad Estatal de Michigan en los Estados Unidos han estado tratando de averiguar cómo destruirlos para tratar la enfermedad cultivando primero 6.000 biofilms en placas de Petri.
«El problema que realmente estamos tratando es encontrar maneras de matar estas biopelículas», dijo Chris Waters, autor líder del estudio y profesor de microbiología.
Ellos agregaron muchos compuestos diferentes a la tobramicina para identificar qué es lo que mejor funciona para matar las bacterias. Veinticinco compuestos potenciales fueron efectivos, pero uno sobresalió, el triclosán.
El Triclosán es efectivo contra la fibrosis quística
«Es bien sabido que el triclosán, cuando se usa solo, no es efectivo para matar estas bacterias», señaló Hunt, becario posdoctoral en microbiología y genética molecular. «Pero cuando vi la lista como un posible compuesto para usar con tobramicina, me intrigó. Encontramos que el triclosán era el que siempre funcionaba».
El Triclosán se ha utilizado durante más de 40 años en jabones, maquillaje y otros productos comerciales debido a sus propiedades antibacterianas. Recientemente, la FDA (Food and Drug Administration) decidió limitar su uso en jabones de tocador y desinfectantes de manos debido a la insuficiencia de datos sobre su mayor eficacia y a la preocupación por su mal uso.
Sin embargo, existen pruebas claras de que su uso en la pasta de dientes es seguro y muy eficaz en la lucha contra la gingivitis.
«Limitar su uso es lo correcto», comentó el coautor Michael Maiden, «la clave es evitar crear resistencia a una sustancia, de modo que cuando se encuentra en demasiados productos, las posibilidades de resistencia aumentan».
«Nuestros resultados [sobre el uso] del triclosán dan a los médicos una alternativa y les permiten usar menos tobramicina en sus tratamientos», agregó la profesora Hunt.