En España, entre el 15 y el 30% de la población está contaminada con Helicobacter pylori, una bacteria que puede causar úlceras pépticas y cánceres gástricos. Las autoridades de salud especifican las indicaciones para el diagnóstico y los métodos de tratamiento de los adultos.
La infección por Helicobacter pylori está muy extendida en todo el mundo. Esta bacteria coloniza exclusivamente la mucosa gástrica. Se estima que entre el 6 y el 10% de los pacientes infectados desarrollarán una úlcera y el 1% desarrollará adenocarcinoma gástrico (cáncer) después de varias décadas.
Sin embargo, las recomendaciones sobre el diagnóstico y el tratamiento de los pacientes infectados «a veces son poco conocidas o aplicadas», según las autoridades sanitaria. Es por ello que se acaban de publicar dos hojas informativas sobre las modalidades de diagnóstico y tratamiento de los adultos infectados.
En busca de la bacteria
La búsqueda de la infección por Helicobacter pylori se recomienda en los casos de:
- úlcera gástrica o duodenal
- en caso de dispepsia crónica sin lesión visible en la gastroscopia,
- en caso de anemia debida a una deficiencia de hierro o de vitamina B12 sin causa comprobada
- ante una púrpura trombocitopénica inmunológica o una forma de linfoma
Si se toma aspirina o medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) en un paciente con antecedentes de úlcera, la investigación y el tratamiento de la infección pueden prevenir las recurrencias.
La búsqueda de infección también está indicada en presencia de factores de riesgo de cáncer de estómago y antes de la cirugía de bypass de obesidad.
La ejecución de la operación de tratamiento
De acuerdo con las recomendaciones de la HAS, el tratamiento no es urgente y debe ser diferido en mujeres embarazadas o en período de lactancia. «Si es posible, se debe guiar de acuerdo con la sensibilidad de la bacteria a los antibióticos, en particular a la claritromicina. En este caso, es posible tratar al paciente eficazmente con la triple terapia guiada durante 10 días».
La eficacia de este tratamiento debe ser controlada sistemáticamente por una prueba de urea marcada «porque ningún antibiótico es 100% efectivo».
Si la sensibilidad de la bacteria a los antibióticos no puede ser evaluada, «es necesaria una terapia cuádruple que combine un inhibidor de la bomba de protones (IBP) y 3 antibióticos durante 10 a 14 días». Una vez más, se recomienda una prueba de control de urea marcada.